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Los esenciales de Europa para este otoño

Los esenciales de Europa para este otoño

El continente europeo alberga ciudades que, además de ser centros económicos de su zona, son increíbles destinos turísticos; algunos ya dotados de una gran popularidad y otros aún por descubrir. Os proponemos un recorrido por diez hitos europeos para viajar este otoño y conocer, sin los agobios del calor y la masificación del verano, unas ciudades y regiones que no te dejarán indiferente.

VALENCIA, España

Es la tercera ciudad más grande de España y mucho más que paella y Fallas. Descubrirla en otoño es hacerlo con una temperatura inmejorable y sin los agobios del verano ni las fiestas. Valencia, capital de la Comunidad Valenciana, tiene muchísimo que ofrecer. Para empezar, cuenta con una interesante vida cultural, con uno de los primeros Museos de Bellas Artes del país y los vestigios de los pasos de distintas culturas como la musulmana o la gótica en su arquitectura. Un claro ejemplo de esto se puede encontrar en las Torres de Quart, parte de la antigua muralla, o la Lonja de la Seda, importante edificio gótico declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Segundo, por su clima, bueno todo el año, lo que la convierte en un destino ideal en cualquier estación. Y tercero, porque además de la paella, son muchos los deliciosos platos valencianos hechos a base de arroz, y los que no lo están. Además, Valencia conjuga cultura y playa, por lo que, también en otoño, puedes disfrutar de un agradable y tranquilo paseo por su playa de la Malvarrosa. Adéntrate en el centro histórico de Valencia y descubre la catedral del siglo XIII, construida sobre los restos de una antigua mezquita, las Torres de Quart o la Lonja de la Seda, mencionadas anteriormente. Si estás cansado, haz una parada en la Horchatería de Santa Catalina, con 200 años de tradición, que se precia de hacer la mejor horchata con ‘fartons’ -dulce típico- de la ciudad.

KOTOR (Montenegro)

El turismo internacional comienza a llegar a Montenegro, sobre todo a bordo de los cruceros que recorren la bahía de Kotor, en la costa del Mar Adriático. El corazón de Kotor surge esencialmente entre los siglos XII y XIV, cuando el latido de la ciudad lo motivaba el trajín de los comerciantes y marineros que impulsaban la actividad económica que hizo florecer Kotor. Su historia y belleza hicieron que recibiera en 1979 el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad puesto que todo su centro histórico es una amalgama de edificios insignes, iglesias y calles donde el Medievo aún se palpa. Menos conocido es el norte del país, una región para aventureros sin apenas turistas. Al menos de momento. Los más lanzados pueden hacer rafting en el cañón de Tara, el más profundo de Europa, dentro del parque nacional de Durmitor, patrimonio mundial, o explorar reservas naturales más desconocidas aún. La gran joya es el parque nacional de Biogradska Gora, acurrucado en los pliegues de los montes Bjelasica, con un ambiente sereno, solitario y virgen. 

Catedral de Palermo.

PALERMO (Italia)

El otoño en la capital siciliana ofrece días aún cálidos y llenos de luz por eso es uno de los mejores momentos para disfrutar de Palermo. Esta concentra en su superficie más de 2.700 años de historia, cultura, gastronomía con el mejor vino y un clima cálido todo el año. Fue fundada por los fenicios, y recibió el nombre de Zyz. Más tarde, los romanos la llamaron Panormus. Palermo vivió a lo largo de su historia sucesivas conquistas de germanos, romanos y cristianos, lo que ha dejado huella en la ciudad. Es además muy famosa para los amantes del Street Food ya que cuenta con puestos de comida ambulante repartidos por toda Palermo. Algunas de las especialidades son los arancinii, bolas fritas de arroz con queso y salsa, entre otras muchas. En Palermo uno no se puede perder sus mercados tradicionales o los principales monumentos de la ciudad, como la Catedral, las Catacumbas de los Capuchinos, el Palacio Real, la Ópera, que es la más grande de Italia, o la bellísima fuente Pretoria.

BRIGHTON (Reino Unido)

Es uno de los destinos de costa más populares para los ingleses y también ha sido durante años muy cotizado como destino de turismo idiomático entre los jóvenes europeos. Brighton se encuentra situada a una escasa hora en tren desde Londres y es conocida por su carácter liberal, favoreciendo la creación de una importante comunidad LGTB en la ciudad, además de ser hogar de muchos artistas emergentes. Durante los meses de verano la ciudad multiplica su población hasta los topes, por lo que el otoño o la primavera son dos buenas épocas para conocer la zona. Brighton tiene una gran variedad de locales veganos y ecológicos que son una buena manera de empezar el día, para ir a continuación a dar una vuelta por el paseo marítimo. Los imprescindibles de la ciudad son el Royal Pavillion, un bellísimo palacio real; The Lanes, su antiguo barrio de pescadores y hoy un laberíntico entramado de callejones; y el Brighton Pier, que es el embarcadero de la ciudad y su imagen más icónica. El Palace Pier lleva en pie desde 1823 y cada noche se ilumina con 60.000 bombillas. 

Detalle de la ciudad de Burdeos.

BURDEOS (Francia)

Puede convertirse en uno de los destinos urbanos más deseados pues a esta ciudad gala muchos la llaman ‘la Bella Durmiente’ francesa: llena de encanto, pero que no terminar de despegar. Burdeos está lista para despertarse completamente: la Cité du Vin (Ciudad del Vino), que se inauguró en 2017, continúa la gran reconversión de las orillas del Garona y ofrece una experiencia vinícola única. Por eso Burdeos pasó en el último año a encabezar algunos de los ránking de las urbes que uno no podía perderse en nuestro Continente. Burdeos está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y cuenta con más de 350 edificios declarados o inscritos en la lista de monumentos históricos. Una de sus joyas es la la Place de la Bourse y detrás se encuentra el Barrio de Saint Pierre, el corazón histórico de la ciudad, con sus antiguas y pintorescas callejuelas.

CONSTANZA (Rumanía)

Constanza es un cruce de rutas comerciales a orillas del Mar Negro, cerca de la frontera con Bulgaria y a poco más de 180 kilómetros del Estrecho del Bósforo. Es una de las ciudades más grandes y antiguas de Rumanía y la más conocida de su costa por el clima y sus bonitas y extensas playas. Su puerto es el más grande del país y en su patrimonio están las huellas de 2500 años de historia, desde interesantes vestigios que recuerdan que fue una importante colonia griega a otros que marcan el paso de los romanos, el Imperio Otomano o los comerciantes genoveses. Entre sus visitas imprescindibles están la del Casino (Cazinoul), el edificio más emblemático de la ciudad y que está situado al final de un hermoso paseo a orillas del Mar Negro. Es un impresionante edificio Art Nouveau y, aunque en la actualidad está cerrado, sigue siendo un lugar simbólico y bellísimo de la ciudad. La Gran Mezquita de Mahmudiya combina elementos bizantinos y elementos de la arquitectura rumana. En su interior hay una gran alfombra persa, la más grande de Europa. Su Catedral Ortodoxa de San Pedro y San Pablo, de estilo greco-romano, es de gran belleza y destacan los murales de estilo neobizantino del interior. Por último, Mamaia es uno de los lugares favoritos de la gente de Constanza. Se trata de un complejo turístico a tres kilómetros del centro de la ciudad que se alarga en una fina franja de arena entre el Mar Negro y el Lago Siutghiol, con numerosos hoteles, casinos y restaurantes. 

CRACOVIA (Polonia)

Una de las ciudades con más encanto de Polonia es Cracovia. Esta fue la capital polaca entre 1038 y 1569 y su fundación está rodeada de leyendas, entre ellas, que se construyó encima de la cueva de un voraz dragón. Cracovia es una ciudad vibrante, llena de bares, restaurantes y clubs, así como museos, teatros y tiendas, y también con un fascinante casco histórico declarado Patrimonio de la Humanidad. Es una de las ciudades favoritas de los estudiantes para ir de Erasmus, pues posee mucho ambiente joven durante todo el año. El otoño es una época excelente para visitar Cracovia, aunque, si te gusta ver un paisaje nevado, el invierno también será un momento perfecto. De su patrimonio, no te pierdas el Castillo de Wawel o disfruta de un paseo por Zakrzowek, un lago escondido en una antigua cantera. También puedes caminar por la orilla del río Vistula o entrar en alguno de los muchos museos de Cracovia, que van desde el museo de la ciudad hasta el museo de la aviación polaca. Puedes terminar la tarde visitando el antiguo barrio judío, el Kazimierz, que cuenta con muchísimas sinagogas y edificios singulares. Cerca de Cracovia, una de las visitas imprescindibles es la del campo de concentración de Auschwitz.

LUGANO (Suiza)

La ciudad suiza de Lugano se encuentra a tan solo ocho kilómetros de la frontera italiana y durante siglos fue motivo de disputa entre Milán, Francia y los Estados Confederados Suizos, hasta que pasó a manos de éstos últimos en el año 1513. Es la ciudad más famosa del cantón Ticino y es conocida por sus casinos, bancos y por la naturaleza que la rodea con un lago y las montañas de Monte Bré, Monte San Salvatore y Sighignola, por lo que es un destino ideal para los amantes de los deportes y las actividades al aire libre. Déjate sorprender por el encanto del centro de la ciudad, con la Catedral de San Lorenzo, la Iglesia de Santo Stefano o Santa Maria degli Angeli. También puedes dedicar tiempo a visitar los múltiples museos de arte de Lugano, como la Buchmann, galería de arte contemporáneo, o la Galleria Photographica Fine Art. Una bonita excursión es subir al Monte Bré y admirar las vistas de Lugano. 

SOFÍA (Bulgaria)

Iglesias, palacios, catedrales, teatros… La capital búlgara alberga decenas de interesantes edificios históricos, siendo una de las capitales más antiguas de Europa. Sofía es además una ciudad de contrastes, donde modernos hoteles y restaurantes compiten con los destartalados y rectilíneos bloques de la época soviética. Un punto de referencia es la visita a la grandiosa Catedral de Alexander Nevski, con impresionantes cúpulas doradas de estilo bizantino; la Sinagoga de Sofía es la más grande de los Balcanes; los Baños Centrales, aunque están cerrados desde 1986, su edificio es un punto turístico digno de ver; también destacan las iglesias de San Jorge, San Nicolás y la de Boyana. Hay que visitar el Mercado Tradicional para empaparse de la esencia de la personalidad búlgara, en un lugar lleno de productos típicos. De su gastronomía destaca la extensa  variedad de ensaladas y las famosas sopas búlgaras. 

Vistas del puerto de Nicosia.

NICOSIA (Chipre)

Es la ciudad más grande de la isla de Chipre y la capital, se encuentra aproximadamente en el centro de la isla. Además está rodeada por las montañas Kyrenian que, debido a su forma, son conocidas como las Montañas Pentadaktylou, “cinco dedos”. Nicosia tiene un aire griego, con terrazas donde comerse una ensalada de feta y un yogur helado, mientras que también tiene otro marcado aire turco, con sus bulliciosos mercados con olor a especias, mezquitas iluminadas y flautistas tocando por las calles. Es un auténtico y bello choque de culturas. Puede cruzarse a pie la frontera por la calle Ledra, en el centro histórico de Nicosia. En la parte norte, la turca, destaca la plaza Atatürk, la espectacular posada de Büyük Han, repleta de tiendas y bares, y la antigua catedral Selimiye, convertida en mezquita en 1570. En el sur, Nicosia se convierte en un enclave mediterráneo, donde destaca la Iglesia Arcángel Miguel Trypiotis, entre las laberínticas calles de la ciudad. 

 

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