FRANCIA
El viejo París y Montmartre
Es una de las capitales más visitadas del planeta debido a su precioso centro histórico lleno de rincones románticos, su oferta cultural inabarcable en museos y galerías, sus restaurantes y tiendas cuna de las tendencias europeas o su bullicioso ambiente multiétnico. Sus imprescindibles son encaramarse a la imponente Torre Eiffel para contemplar la Ciudad de la Luz; visitar la iglesia de Nôtre-Dame, obra maestra del gótico; el museo del Louvre; los Campos Elíseos; un paseo a orillas del Sena; y, sobre todo la colina más célebre, Montmartre, con su insólita iglesia del Sacré Coeur. Es el barrio bohemio, donde se reúnen multitud de músicos, novelistas y pintores con sus lienzos.
TURQUÍA
Capadocia, un milagro de la naturaleza
Es un lugar único en el mundo, se encuentra en la región de Anatolia y es el resultado de erupciones volcánicas que cubrieron toda la meseta. Luego, la erosión fue creando lo que hoy son caprichosas estalactitas al aire libre, ‘termiteros’ gigantes, pirámides, chimeneas… alcanzando algunas los 40 metros de altura. Un paisaje incluso surrealista ya que la mano del hombre ha moldeado el lugar construyendo refugios y habitaciones interconectadas entre sí y cientos de galerías subterráneas que hoy pueden recorrerse. El Parque Natural de Göreme es un impresionante complejo monástico construido en la roca y recubierto de frescos que compone uno de los lugares más bellos de la Capadocia.
PORTUGAL
Un antojo en Lisboa, el barrio de Alfama
Es la parte más imprescindible de la ciudad, un barrio de legado cultural inmenso porque en él convivieron judíos, cristianos y musulmanes, y el más antiguo de Lisboa. Su entramado de calles adoquinadas y acogedoras plazas forman un laberinto medieval que transporta en el tiempo al viajero, que encontrará pequeños patios con flores, típicas casas, ropa tendida y cuestas sin fin. Lisboa tiene aroma a café y su esencia son los antiguos funiculares y tranvías que cruzan la ciudad. El barrio marinero de Belem es otro imprescindible, con el Monasterio de los Jerónimos, obra cumbre del estilo manuelino; la Torre de Belem, a orillas del inmenso Tajo; o el imponente Puente 25 de Abril, el colgante más largo de Europa.
ITALIA
El fascinante escenario de Venecia
Las calles, palacios, teatros y plazas a ras del agua parecen no tener fin y forman un ‘decorado’ fascinante en la ciudad de Venecia. Está construida sobre una laguna en el Norte del mar Adrático y hoy en día el Gran Canal inunda buena parte de la ciudad dejando una hilera de varios kilómetros de palacetes frente al agua que podrás recorrer sobre preciosas góndolas. Otro icono veneciano es la plaza de San Marcos, con el admirable Palacio Ducal. Déjate llevar por su entramado de puentes, de íntimas callejuelas, por sus mercados, admirando las máscaras venecianas y pégate un atracón de belleza en esta onírica ciudad.
REPÚBLICA CHECA
El gran museo vivo: Praga histórica
La capital checa alberga un tesoro de alrededor de 900 hectáreas de callejuelas y hermosas plazas, palacios, jardines y cúpulas repartidos por cinco barrios imprescindibles que atrapan al viajero con su encanto. La Plaza de la Ciudad Vieja es una de las más hermosas y románticas del mundo, con la famosa Torre del Reloj, el ayuntamiento gótico y la preciosa iglesia de Tyn. Es imprescindible cruzar y admirar la ciudad desde el Puente de Carlos IV, el más antiguo y fotografiado, que soporta el peso de turistas, artesanos y artistas callejeros. Descubre lentamente cada uno de sus barrios históricos y disfruta del ambiente de sus conocidas cervecerías.
NORUEGA
Bergen y la increíble ventana los fiordos
Las pintorescas casas de madera de Bergen, pintadas de llamativos colores y colocadas en fila, una tras otra, ofrecen una llamativa imagen de la que es una de las ciudades más antiguas y más bellas de Noruega. Su zona más bonita es el barrio de Bryggen, el muelle, con los edificios más antiguos, Patrimonio de la Humanidad. Desde aquí puedes iniciar las rutas más bellas de Noruega hacia impresionantes paisajes y fiordos, esos tajos desmedidos que recortan la costa y dejan precipicios de vértigo. Naturaleza repleta de lagunas y glaciares, parques nacionales y el encanto de sus aldeas con sus iglesias medievales de madera.
BÉLGICA
El prodigio medieval de Brujas
Su increíble red de canales, que atraviesa la ciudad, le hace que reciba el nombre de ‘la Venecia del Norte’. Todo Brujas es un prodigioso modelo de conservación de ciudad medieval y una de las más pintorescas y seductoras de Europa. La parte antigua de la urbe está totalmente amurallada, conservándose prácticamente intactos todas sus torres y accesos. Es tal la cantidad de monumentos y tesoros artísticos que contiene que es un auténtico museo al aire libre. El centro de la ciudad es Marktplatz, una plaza de cuento rodeada de espléndidas fachadas de forma escalonada llenas de cafés y restaurantes, junto al imponente campanario gótico conocido como Atalaya.